El padre pescador y los niños en la noche

Una noche, mientras dormía en el sexto piso de un edificio céntrico, escuché el llanto de un niño…

Me desperté sintiendo ese dolor, casi insoportable; me dirigí hacia la ventana y observé una familia joven: un padre y una madre de poco más de 30 años con dos hijos – una niña de unos 12 años aproximadamente y un niño de, quizás 10 años. Estaban buscando alimentos en la basura y aquel llanto provenía del cansancio de caminar y caminar en la noche urbana, según pude escuchar. Era poco más de la 1:00 AM.

No pude someter la angustia y dirigí a Dios ese dolor en forma de pregunta:

¿Por qué sucede esto? ¿Por qué estos niños sufren de esta manera?

Un padre y un hijo

Quizás una semana, o tal vez dos, después de aquella noche, fui por la mañana a un parque cercano que tiene un lago; es un lugar pequeño pero muy lindo. Solía ir allí a tomar mate (una infusión común en Sudamérica), reflexionar y escribir. Era la mañana.

Tras el parque se encuentra una avenida que rodea la ciudad y sirve de ingreso; luego, un acceso hacia el río Paraná. Se trata de una zona de islas y pescadores (a 500 o 1000 metros desde el lugar en el que me encontraba).

En aquel momento veo llegar a un hombre, de aproximadamente 40 años con su hijo, de tal vez 10 años; arribaron juntos en una bicicleta. Remeras, pantalones cortos y calzado ligero, personas muy humildes, posiblemente pescadores de la región. El padre llevaba un tirante (madera de forma prismática, de 6 o 7 centímetros de diámetro por 2 metros de largo, según pude observar) atado a la bicicleta que tenía, en uno de los extremos, un hierro con punta afilada amudado formando una especie de lanza muy rudimentaria.

Cuchillo y hacha. Herramientas primitivas del ser humano que mantienen su vigencia a través del tiempo.

El hombre se introdujo en el agua y, con aquella improvisada arma de pesca empleada por el ser humano de esta manera desde hace miles de años, pescó cinco peces de río de buen tamaño ante la mirada eufórica de su hijo que saltaba y corría de un lugar a otro festejando el logro. Permíteme mencionarte que esto representa una muy buena provista de proteínas.

Más allá del valioso significado nutricional, este hecho fue una importante respuesta al suceso anterior y me produjo múltiples significados; desde mi punto de vista, de capital importancia para comprender el contexto que me rodea. El primero de ellos tiene que ver con la transmisión de un don de padre a hijo, una especie de carrera de postas de la vida y la cualidad esencial de la función paterna. El padre pescador que te menciono posiblemente tenía mayores carencias económica que el padre de los niños en la noche, sin embargo, puede transferir a su hijo el don de pescar con el que salvarle la vida y la de miles de generaciones posteriores a él, cosa que el primero no puede hacer. El pescador es parte de una sucesión matemática de miles de generaciones, mientras que su urbano contemporáneo ha perdido totalmente su conexión con el origen y ha dejado huérfanos de símbolos a sus hijos.

La muerte del padre

El padre urbano y pobre ha caído en la desgracia de los subsidios estatales; por mucho tiempo los hombres y mujeres de su entorno se han acostumbrado a recibir una ayuda económica de parte del Estado (quizás una urgencia social inevitable), sin embargo, cuando la necesidad crece este hombre se encuentra ante una realidad aterradora: no tiene recursos propios con los que generar su subsistencia, menos aún posee algo que enseñar a sus niños. Él sabe sólo una cosa: necesita más ayuda de un gran Otro de cuyo lazo mortífero no puede salir; un primer día fue un subsidio que le permitió comprar alimentos y zapatillas, hoy ese otro sólo le deja desperdicios en la basura por los que debe caminar largas horas en la noche. Sucesión familiar interrumpida.

Psicología profunda: tu análisis

La Psicología Junguiana de la que parto en mi análisis (también he tomado algunas idea del Psicoanálisis de Jaques Lacan) pretende mostrar una situación, plantear un problema, no explayarse en las interpretaciones, lo cual queda en «tus manos», estimado lector, estimada lectora. Te invito a tu reflexión personal… Quizás pueda tener un significado para tí. Si descubres «un tesoro escondido» aquí… no lo compartas. Hoy es mejor tiempo para la introspección.

El padre pescador, arquetipo ancestral del ser humano, hermano al del originario cazador

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s